Siempre escucho dos versiones: la pareja que dura jalando 5 años, de repente terminan y cada uno se casa a los tres meses por su lado. O la pareja que se conoce y a los tres meses se casa y duran una eternidad felices.
Yo siento que es interesante y tienen cierto misterio las “relaciones cortas”, es decir cuando uno decide probar con alguien sabiendo que no es el hombre de tu vida, y te dedicas a disfrutar, no importa si vuelve a ver otras mujeres en la calle, por que de por si no es nada serio, (hasta me toco topármelo en la entrada del teatro nacional con sonriente y extranjera amiga); lo que realmente no me molesto en lo absoluto, yo sabia que los encuentros esporádicos que teníamos eran exclusivamente para pasarla bien y sin compromiso.
Mi otra experiencia de la que puedo dar más argumentos: seria lo maravilloso de tener a alguien para vacaciones, depres, alegrías, sorpresivas vueltas de la vida, uno que otro secreto, desahogos contra la familia, vida sexual muy activa y sin riesgos de enfermedades, un apoyo incondicional, sin dejar a un lado: el aguantarse las chichas, conocerse tanto que cualquier respuesta o acción puede resultar predecible, necesarias explicaciones, demanda de tiempo y de afecto físico.
Un amigo que asegura que “el no cree en relaciones largas…” y lleva tres años con la novia!... el tiempo no es importante; lo significativo es que las cosas duren mientras las dos partes la estén pasando bien, continúen creciendo y exista comunicación y cariño incondicional.